Sunday, June 29, 2008

Un alegrón



Soy hincha de Boca rabioso, como habrá podido comprobar cualquiera que haya leído este blog. Pero claro, Fede, mi mejor amigo de la infancia era hincha de Independiente, a lo que se sumaba que durante mucho tiempo les envidié dos cosas: Bochini y la mística copera. Por eso, muchas veces fui a ver a Independiente -bah, en realidad, fui a ver a Bochini- durante los '80. Por suerte, les arrebatamos la mística copera, y tenemos a nuestro propio Bochini (Román, para quien no haya visto jugar al Bocha), con lo que ya no les envidio nada, y ahora la simpatía que me queda tiene que ver con mi amistad con Fede.
Pero claro, la vida me regaló otros dos grandes amigos, Matías y Agustín. Con Matías somos amigos desde hace 25 años, con Agustín desde hace 12. Ambos son de Racing. Y, a través de ellos, por verlos sufrir la mayor parte de las veces, festejar las menos, pero apasionarse siempre, fue que mi simpatía se inclinó hacia la Academia. Y también, por ver a esa hinchada increíble, estoica y fiel como no hay dos. En 2003, cuando Racing cumplió cien años, escribí esto:
"Hoy la Academia cumple cien años de existencia, cien gloriosos años teñidos de celeste y blanco, construidos con fintas y gambetas, y también con alguna lágrima. Porque el hincha de Racing sabe de la gloria y del dolor, como pocos. Por eso, como pocos, entiende del sentimiento, de la pasión interminable, del amor a prueba de balas. La Academia, club señero si los hay, primero en todo, si hasta se dio el lujo de conseguir lo que nadie ha podido superar: ¡siete campeonatos al hilo! Porque el amateurismo existe, ¡vaya si existe! En esos tiempos en los que lo que importaba era el noble amor a la pelota y no los sponsors o el partido televisado, Racing bordó un sueño de fútbol bien nuestro y, de tanto dar cátedra, se volvió Academia. Y llegó el profesionalismo y Racing volvió a ser el primero: en ganar un tricampeonato, en ser campeón de América, en ser dueño del mundo. Los Maschio, Cejas, Chueco García, Corbatta, Basile, Cárdenas, Perfumo, Fillol, Rubén Paz, el imborrable José, esos nombres que son sinónimo de glorias pasadas e inolvidables. Los Milito, Bastía, Mariano González son la promesa del mañana. ¿Treinta y cinco años sin salir campeón? ¡Qué mejor manera de templar a fuego el sentimiento celeste y blanco! ¡Qué mejor manera de dar cátedra una vez más, esta vez a los otros hinchas y en materia de la pasión! Hoy cumplís 100 años, Racing, y como decía tu hincha más entrañable "las nieves del tiempo blanquearon tu sien", es cierto, pero agigantan tu gloria. Felicitaciones, Racing. Con admiración genuina. Un hincha de Boca".
Hoy Racing bordó otra hazaña del corazón y me hizo gritar un gol ajeno como si fuera de Boca. Y este hincha de Boca se alegra otra vez, porque Racing sigue donde debe estar, donde Agustín y Matías y toda la Guardia Imperial merece que esté. Racing es de Primera, y de Primera no se va. ¡Chapeau!

Labels:

Wednesday, June 25, 2008

La pelota no se mancha



Hace 10 años laburaba como redactor de una revista infantil y se estaba haciendo una suerte de enciclopedia de la Argentina que tocaba numerosos temas: desde historia y geografía, hasta ciencia y deportes. Una conocida escritora infantil tenía a su cargo la parte de Deportes y estaba eligiendo los grandes campeones y figuras del deporte argentino: así aparecían el Diego, la Selección del '86, Reutemann, Fangio, Vilas, Sabatini, Porta... Pero faltaban el campeón del '78 y Monzón.
En una reunión de redacción señalé ambas ausencias, imaginando de todas maneras por dónde venía la mano. Monzón quedaba afuera por dos motivos: estaba en la cárcel por matar (accidentalmente) a su mujer y además ella no consideraba un deporte al boxeo. Y el Mundial '78, según su visión de las cosas, no podía estar bajo ningún concepto ya que había sido "propaganda del Proceso".
Respecto a Monzón, mi respuesta fue: "Flaca, el Diego se da con merca, ¿lo vas a sacar por eso? ¿Vas a negar la dimensión deportiva (que es de lo que estás hablando) por las desgracias de su vida personal? Además, vos no podés decretar que el boxeo no es un deporte. Si no, dejá afuera al rugby también, que puede llegar a un alto grado de violencia y no lo pongas a Porta". Obviamente no le hizo mella, como tampoco lo haría mi opinión respecto al '78.
A ver, todos sabemos en qué contexto se desarrolló ese Mundial, todos sabemos que la ESMA estaba a apenas unas cuadras del lugar en el que se jugaba la final, todos sufrimos el mismo asco al ver las imagenes de la Junta festejando en el palco, nadie tiene dudas de que el Proceso pensó en utilizar el Mundial como una formidable propaganda para el regimen. Todo eso está claro.
Pero de allí a menoscabar el logro deportivo, por esos motivos, hay una distancia importante. Por un par de razones.
La primera de ellas es futbolística. Argentina fue el mejor equipo del torneo, claramente. Incluso en el partido que perdió con Italia, lo hizo inmerecidamente. Los jugadores no estaban al tanto de lo que ocurría -con la excepción de Tarantini, que tenía un familiar desaparecido- y por otra parte estaban jugando para darle una alegría al hincha, no a Videla y cía. Argentina no tuvo el camino fácil: perdió con Italia, lo que hizo que tuviera que irse a jugar a Rosario, empató en un partido durísimo con Brasil, y tuvo que ir al alargue con Holanda, con un tiro en el palo a segundos del final. Por otra parte, repasemos rivales: Holanda, Francia, Italia, Brasil, la Polonia de esa época que era una maquinita... Jodido. Pero a casi todos ellos los superó con autoridad, jugando muy bien al fútbol.
Después está el famoso partido con Perú. Hay varias lecturas para ese partido. Lógicamente, los detractores de la Selección del '78 dan por descontado que estaba arreglado. Pero cualquiera que recuerde un poco más allá, puede enumerar un par de conceptos importantes. Argentina tenía que hacerle 4 a Perú, pero le hizo 6. Apenas dos meses antes le había clavado 4 en un tiempo y en Lima. Perú perdió todos los partidos de la segunda rueda: 1-0 con Polonia y 3-0 con Brasil. De hecho, llegó al partido con Argentina después de perder con Polonia y Brasil. Es decir, llegó a enfrentar a la Argentina derrumbado anímicamente, vapuleado futbolísticamente y eliminado de la competencia. Ergo: golear a Perú no era una misión imposible ni mucho menos. Con un panorama semejante, Argentina le metió 6 a Serbia en el último Mundial. Pero encima, antes de los primeros quince minutos de juego, Perú le metió dos tiros en los palos a la Argentina. Dos tiros que si entraban, andá a cantarle a Gardel. Cualquiera que haya jugado alguna vez, sabe que los tiros en los palos no son algo arreglable. Uno la puede tirar a las manos del arquero, o reventarla por encima del travesaño, pero nadie está capacitado técnicamente para darle adrede a un palo con la pelota en movimiento. Amén de que, quien revea el partido, se va a dar cuenta de que los peruanos le metían rigor a la marca, no era que los jugadores argentinos pasaban caminando. A lo que voy es: ¿puede haber habido un arreglo? Qué duda cabe, estamos hablando del Proceso, tratando de asegurarse el peso propagandístico que podía tener una Argentina finalista del Mundial. Pero la realidad dicta que, en primer lugar, el arreglo no ha podido ser demostrado aún. Y, en mi opinión personal, de haber existido se me ocurre que no todo el equipo peruano estaba arreglado, porque si no, no se explican ni los dos tiros en los palos, ni la vehemencia con que jugaron los peruanos. Y hay algo que me queda clarísimo: si algunos jugadores peruanos fueron a menos, los jugadores argentinos no tenían la más mínima idea.
Justamente, la vida de cronista deportivo me ha llevado a conocer a muchos de los jugadores del '78. Y qué quieren que les diga: tipos como Fillol, Luque, Kempes, Bertoni, Ardiles, el Tolo Gallego, son tipos nobles, rectos, a los que realmente les duele que los quieran poner en un papel que estuvieron lejos de protagonizar: el de cómplices de la dictadura.

La otra gran razón podría denominarse como política, aunque no estoy del todo seguro si ese es el término adecuado. En este plano, entiendo que la realidad es que en 1978, la cantidad de gente que sabía lo que estaba pasando era menor. Sacando de la película a aquellas partes interesadas (los que sabían y apoyaban que así fuera; y los que sabían, y luchaban contra lo que estaba ocurriendo), había una enorme masa de gente que no sabía de la existencia de desaparecidos, ni de los campos. Y no es algo tan extraño que así fuera. Durante la Segunda Guerra Mundial, millones de alemanes no tenían ni idea de la existencia de los campos de concentración ni de la Solución Final. Pensaban que los judíos habían sido deportados, pero no se les cruzaba por la cabeza otra posibilidad, porque no les cabía en la cabeza -además- una posibilidad tan horrorosa.
Siguiendo esa línea de pensamiento, no puede caerse en esa postura condenatoria de "deberían haber sabido, deberían haber tomado posición". No podían saberlo. E, incluso, en el caso de saberlo no tenían por qué tomar posición. E incluso si hubieran tomado posición, se torna absurdo boicotear un hecho deportivo porque los milicos quisieron utilizarlo políticamente. Aclaro esta última apreciación, por que sé que puede ser tomada para el churrete. La utilización política de eventos deportivos es un clásico de la Historia. Lo ha hecho Mussolini con el Mundial de Italia y Hitler con los Juegos Olímpicos. Y también lo hizo Alfonsín en el 86 y el Turco en el 90, llevando a Diego & Co. al balcón de la Rosada. Yo pregunto, ¿alguien fue tan pelotudo de creer que Alfonsín o el Turco tuvieron algo que ver con el éxito deportivo de esas selecciones? A lo que voy: es cierto que si los boludos volaran sería todo el tiempo de noche, pero la gente no es taaaan pelotuda. Nadie pensó que la dictadura tenía algún merito en lo que hicieron Kempes y los suyos dentro del campo de juego. Nadie. La propaganda no funcionó.
Por otra parte, como bajo toda dictadura, existía una mayoría silenciosa, que trataba de seguir haciendo su vida lo más "normalmente" posible. Alguno podrá reclamarle cobardía, pero no todo el mundo tiene por qué ser valiente. Ya lo graficó Quino alguna vez con Felipe, puesto entre la alternativa de "Morir de pie o vivir de rodillas", él eligió su "Y digo yo, ¿no es posible subsistir sentado?". Seres humanos, no superhombres. Para esa porción de gente, mayoritaria ella, que en general no sabía lo que ocurría más allá de la propaganda oficial, el Mundial era una buena excusa para estar unidos con lo único que parece capaz de unir a la gente en este país: la Selección. Y entonces festejó y disfrutó conforme a la dimensión del evento: Argentina campeón del mundo por primera vez.
No se puede buscarle la quinta pata al gato siempre. No me cierra el concepto bushiano: estabas a favor o en contra de la dictadura. Si no tomabas posición eras cómplice. Dejemos la ausencia de grises para Hebe, o para Patti. Porque si se asume esa postura, todo lo que haya sido hecho en cualquier campo, entre 1976 y 1983, es pausible de ser repudiado como posible propaganda dictatorial o como escapismo burgués. Reutemann, Monzón, Vilas, Boca e Independiente campeones de América e Intercontinental, la Selección Juvenil '79, tanto como cualquier hallazgo científico, o como cualquier talento artístico que no se haya exiliado (una porción muuuuy grande). Utilizando ese criterio cualquier cosa se vuelve cuestionable. Y ahí es cuando, queda claro, se está meando fuera del tarro.

Labels: ,

Tuesday, June 24, 2008

Artista del siglo

Yo creía que Pomelo era imposible de desbarrancar de los charts, pero cómo me equivoqué...

Labels:

Monday, June 23, 2008

A lo Boca

Tarde helada y cancha techada sobre Dorrego. Raphael, delantero brasileño que juega en el Palermo FC (equipo en el que disputamos torneos los sábados) nos propone aprovechar el receso de nuestro campeonato y hacer un cinco contra cinco. Juntamos los cinco (para los que los conocen: Gustavo, mi primo Hernán, Tweety, Fer y quien esto escribe) que se animaban en una tarde en la que Italia-España invitaba a quedarse en casa, abrigaditos y mate en mano, y partimos para jugar contra "algunos compañeros del hospital", según definición de Rapha, médico él.
Claro, al llegar recordamos que a Rapha le gusta hacer este tipo de cosas. Porque los "compañeritos" resultaron ser otros cuatro brasileños, con pinta bien futbolera ellos y promesa de pintarnos la cara. Las cosas quedaban planteadas entonces para un Argentina- Brasil, con el orgullo a prueba.
Mi experiencia en partidos "internacionales" incluía enfrentamientos contra equipos de Uruguay, Colombia, Italia y Estados Unidos, pero nunca había tenido la suerte de enfrentar a un equipo brazuca.
Para qué. La cosa arrancó como para imaginar una pesadilla futbolística: a los 10 minutos los muchachos estaban 4-0 arriba, con tacos, caños y firuletes incluidos. Pintaba fiero y una ya les veía en la cara esas sonrisitas socarronas que los caracterizan cuando están bailando al rival. Y más si el rival es argentino.
Lógicamente, eso nos tocó el orgullo: no pensábamos perder este partido. Cuestión que nos ordenamos, empezamos a pelear cada pelota como si fuera la última, nos cerramos mejor atrás y salimos rápido del medio para adelante... ¡y les dimos vuelta el partido!
La alegría duró poco. El exiguo gol de ventaja se esfumó como por arte de magia gracias a una seguidilla de cuatro goles brasileños. Estábamos tres abajo, lo que nos obligó a una nueva remontada. Esta vez fuimos nosotros los que nos pusimos cuatro goles arriba. Sin embargo, ellos empezaron a acercarse y, faltando cinco minutos, estábamos apenas un gol arriba. En el interín, la cosa se había puesto áspera, y se debatía por cada pelota dudosa. Por suerte no hubo ningún posible penal...
Supuestamente, el partido terminaba a las 18 horas, sin embargo, los equipos que jugaban después de nosotros nunca vinieron. Fue así que, faltando un par de minutos para las 18, les planteamos poner una hora de finalización para el encuentro, cosa de evitar suspicacias si lo terminábamos a las 18, con nosotros 1-0 arriba. Se convino seguirlo hasta las 18.20.
Esos últimos veinte minutos fueron gloriosos, porque ellos se vinieron con todo a buscar el empate, tiraban de todos lados y Gus sacaba a destajo, mientras nosotros corríamos lo que ya no podíamos para mantener ese gol definitorio. Pero tampoco comemos vidrio, y observando cierto desalentamiento del rival ante la imposibilidad de empatar, empezamos a toquetar la pelotita y con un par de contraataques fulminantes estiramos la ventaja hasta hacerla irremontable: 4-0.
Qué quieren que les diga, fulbito de entre casa sí, pero me alegró la semana.

Labels:

Tuesday, June 17, 2008

Huevos



Ya está. Me llenaron los huevos.
Me llenaron los huevos ambas partes esencialmente por la soberbia absoluta y la incapacidad de dialogar.
Me llenaron los huevos porque la realidad es que más allá de lo que digan, a ambas partes solo les interesa su porción de la torta y -para variar -les chupa un huevo el pueblo o el país, más allá de que ambos los utilicen como caballito de batalla retórico.
Me llenaron las huevos ambas partes, jugando a ver quién la tiene más larga.
Me llenó los huevos el gobierno con su discurso paranoide y setentista.
Me llenó los huevos que un energúmeno como D'Elía tenga el espacio que tiene y las peligrosas incitaciones a la violencia que hace.
Me llenó los huevos "el campo" y sus defensores, que con atroz caradurismo se arrogan a sí mismos la titularidad de lo nacional y popular.
Me llenó los huevos la cantidad de idiotas útiles de clase media y pequeños productores que le hacen el juego a la Sociedad Rural y sus intereses.
Me llenó los huevos Bonafini hablando de que "acá no hay grises, solos blancos y negros".
Me llenó los huevos el gobierno cargándoles las tintas a los productores, cuando los que encarecen los alimentos son los industriales que elaboran las materias primas que los productores les venden.
Me llenó los huevos "el campo" parando el país y cometiendo -u obligando a cometer- obscenidades como tirar a la basura toneladas y litros de alimentos, en unmundo en el que hay millones que mueren de hambre.
Me llenó los huevos la eternización del aparato peronista.
Me llenó los huevos la inexistencia de una oposición de cualquier signo, capaz de plantarse y representar a alguien.
Me llenó los huevos que se denomine de izquierda a un gobierno que está infinitamente más cerca del fascismo.
Me llenó los huevos no poder rescatar ni un solo político decente, ni uno. Ni un solo dirigente que me de una mínima esperanza.
Me llenó los huevos vivir en un país de eternos pelotudos, incapaces de aprovechar las oportunidades que les brinda la historia, o aprender de los errores cometidos.
Me llenó los huevos la impotencia que me genera saber que solo puedo sentarme a ver cómo se consume la mecha antes de que el país vuele por los aires.

Labels:

Tuesday, June 10, 2008

Say it again, Sam

He aquí algunas de mis frases favoritas de la historia del cine. Faltan varias, lógicamente. Algunas eran demasiado largas, a otras no pude encontrarlas, y otras estaban en idiomas que requerían subtitulado, pero carecían de él (sueco, francés, japonés, etc). Pero bueno, acá van algunas que seguramente recordarán.

I am your father



Frankly, my dear, I don’t give a damn


I’ll be back


Say hello to my little friend


I’m going to make him an offer he can’t refuse


You talkin’ to me?


Do you feel lucky?


He’s looking at you, kid


Bond, James Bond


Here’s Johnny!


The stuff that dreams are made of

Warriors, come out to play!


Smells like… victory


We re gonna need a bigger boat


They pull me back in

Labels:

Tu hamburguesa de rock

La enésima prueba de que Diego Capusotto es un genio.



Labels:

Friday, June 06, 2008

¡Qué grande Benigno!

No quiero dejar que la tristeza por la eliminación me haga olvidar de postear algo que tengo hace rato en gateras. Un toque de humor bizarro para los videos de este sitio.

Labels:

Con el orgullo intacto



Cuando, una vez consumada la derrota de Boca, empezaron a sonar petardos y bombas de estruendo cerca de casa, no sentí lo que hubiera sentido en otro momento. Lejos de la bronca, lo que me generó esa serie de sonidos fue vergüenza ajena por un lado, y un tremendo orgullo por el otro. Vergüenza ajena no porque alguien festeje la caída de un archirrival: esto es fútbol, y el folclore dicta el festejo ante el dolor del enemigo más odiado. Sí vergüenza ajena porque llegar al extremo de oblar dinero para pirotecnia celebrando un triunfo ajeno como propio, me parece una exhibición desmesurada de falta de amor propio. Y también vergüenza ajena porque sé positivamente que no solo los plumíferos de Núñez celebraron nuestra caída, sino también muchos, pero muchos hinchas de otros equipos, que se amuchan en una lamentable legión de "anti Boca". El súmun llegó con el gaste de un hincha de ¡Quilmes! a quien no tuve más remedio que pedirle que primero regrese a Primera. Después nos dicen soberbios, pero tammbién hay algunos a los que les gusta meter la cabeza en la boca del león...
La verdad es que el festejo plumífero es lógico y previsible, pero también me causa cierta pena. Digamos que después del episodio con las aves negras, en esta misma Copa, sumada a la seguidilla de eliminaciones, a cuál más lamentable, es como que el festejo debería ser tan inevitable como moderado. Pero no, hay un descarado derroche de caradursimo.
En el caso de los "anti Boca", qué decirles. La verdad es que siempre, pero siempre, -con la excepción de tu grato nombre, lógicamente- quiero que gane un equipo argentino, más aún si el rival es brasileño. Pero bueno, hay veces en que la envidia nubla la vista por completo.
Y ahí viene la segunda sensación. Es que todo esto no hace sino remitir a la remanida "Ladran Sancho...". Porque una vez más fue Boca el equipo argentino que llegó más lejos en la Copa, a pesar del enooorme listado de contratiempos que sufrió (lesiones de jugadores clave en momentos clave y suspensión de la cancha para instancias definitorias, por mencionar un par), porque digan lo que digan Boca es el mejor equipo de Argentina y de América de los últimos diez años, porque cambian los técnicos y los jugadores pero Boca ganó 16 títulos de 1998 para acá (más que algunos que ahora nos gastan ganaron en toda su historia), porque otros boconean pero lo miran por TV...
De hecho, la superioridad de Boca sobre los plumíferos de Núñez es tal que, no solo los fuerza a festejar únicamente títulos locales, sino que pueden hacerlo merced a la generosidad boquense. ¿Cómo es eso? Fácil. Basta repasar los títulos locales de ambos en el siglo que corre para darse cuenta que River solo obtuvo torneos Clausura y que esos torneos los obtuvo cuando Boca estaba jugando la Libertadores (2000, 2002, 2003, 2004 y seguramente 2008). Cuando Boca no jugó la Libertadores 2006, el torneo Clausura fue para el xeneize. De hecho, en general, y a pesar de estar peleando en ambos frentes, Boca logró al menos estar entre los tres primeros puestos en esos torneos. Los Apertura, cuando Boca no juega la Copa, son generalmente nuestros (2000, 2003, 2005). Me temo que no hace falta agregar mucho más a eso.
Pero, volviendo estrictamente al tema que nos ocupa, que es esta reciente eliminacón de la Copa, decía que fuera de la lógica tristeza por la ilusión extinguida, siento un gran orgullo por este equipo que, sin dudas fue el mejor del torneo. Y fue el mejor del torneo principalmente por su actitud, por la manera de plantarse en cada partido, por ser local en cualquier cancha. Eso habla de grandeza, habla de mística. Pero se sabe, esto es fútbol y el campeón no siempre es el mejor equipo. Esto que le ha cabido alguna vez a algunos Boca campeones, le cabe a aquel que gane la Copa en esta oportunidad.
De hecho, atendiendo a las razones estrictamente futbolísticas, creo que Boca se eliminó solo. Es que padeció dos defectos graves durante todo el torneo, que nunca pudo solucionar: nunca encontró el cerrojo atrás, y le falló demasiado la llave adelante. Durante todo el semestre, Boca padeció demasiado en defensa, incapaz de controlar el juego áereo rival, sufriendo cada pelota cruzada, pagando cada error con un gol en contra. Es cierto que Caranta no fue el Caranta del año pasado, se lo vio dubitativo, tierno para cortar los centros, incapaz de adueñarse del área chica. Es cierto que Cáceres arrancó muy flojo y que Maidana se manda al menos una cagada por partido. Todo eso es cierto. Tanto como que hay dos enormes atenuantes.
El primero es que se marcan estos problemas defensivos como responsabilidad de Ischia, se dice que el tipo no trabaja el tema. Pero esa aseveración soslaya un detalle fundamental: en casi todo el semestre, Ischia no pudo armar la misma defensa dos partidos seguidos. Y cualquiera que haya jugado al fútbol sabe que es indispensable una continuidad de nombres para poder lograr coordinación defensiva. Pero se lesionó Ibarra, se lesionó Cáceres, se lesionó Paletta y se lesionó Morel. Y así, un día jugaba Maidana de lateral y otro día de central, un día estaba Alvaro, otro Monzón, otro Roncaglia...
A eso hay que sumarle otro concepto estrictamente futbolero: la manta corta. Boca ataca y mucho. Como todo equipo que así lo hace -River es otro caso- es muy difícil mantener el equilibrio. Es casi imposible no quedar expuesto atrás, generándole espacios al rival. Es el precio que se paga a una actitud netamente ofensiva. Cuando Bianchi armaba equipos equilibrados, se lo tildaba de defensivo. El gataflorismo hace estragos.
El que sí es un tema es la falta de gol. Hace mucho, pero mucho tiempo que no veo un equipo de Boca que genere tantas situaciones de gol por partido. Boca tuvo mucho volumen de juego en la mayor parte de los partidos del año -más allá de los giles que no entienden nada y siguen con la aburrida cantinela de que jugamos para tirarle centros a Palermo-, armando buenos circuitos de toque con Román, Dátolo y Chávez, con variantes, llegando por afuera o triangulando. En general, Boca debería haber ganado muchos partidos por goleada (Fluminense, Cruzeiro, Atlas, Huracán, Olimpo, Arsenal, Independiente, entre otros) pero terminó empatando, ganando ajustadamente, o incluso perdiendo. Y eso se debió a la enorme cantidad de goles dilapidados, algunos de ellos de manera realmente increíble. Es ahí donde realmente veo un problema al que no le encuentro demasiada explicación, aunque me queda claro que lo pagamos carísimo...

Labels:

Monday, June 02, 2008

Videos del mes

“Redemption song” – Bob Marley
El Bob más groso de todos los Bobs -perdón Dylan, pero así lo veo yo- nos regaló esta joyita que tiene poco de reggae y mucho de folk, pero sobre todo mucho de obra maestra. Aquí una versión más cruda que la habitual.



“Xanadu” – Rush
Estos tres animalitos que nos regaló Canadá son una de mis principales cuentas pendientes en vivo. Espero verlos algún día y que toquen esta canción...



“Comfortably numb” – Pink Floyd
Siempre es difícil elegir una sola canción de determinados héroes. Pero bueno, esta es la que más me gusta, fundamentalmente porque reúne todos los elementos característicos del Pink Floyd clásico: canta Roger la parte enferma, canta David la parte emotiva, tiene un solo conciso y efectivo de David, y -por añadidura- posee formato de canción, lo cual lo hace más accesible que otros temas de la banda.



“Land” – Patti Smith
Descomunal canción que me quedé con las ganas de escuchar cuando esta deidad nos deleitó en tierras argentas.



“London calling” – The Clash
La mejor de las muchas enormes canciones de los Clash. Eternamente zapada con Zelig.

Labels: