Wednesday, September 19, 2007

Música para una isla desierta Vol 5

81- Rage Against the Machine
Rage Against the Machine (1992)
Temas clave: Know your enemy, Killing in the name, Freedom


Esta banda -a la que sigo soñando con ver en vivo alguna vez- y este disco en particular son de esos qu ejamás dejaré de amar. Simplemente, es tal la energía que se puede canalizar a través de ella, que funciona como catársis absoluta. Este disco -el primero y mejor de Rage Against The Machine- es explosivo, como la banda que lo creó. Tiene los mejores riffs de guitarra que se hayan escrito en los '90, sustentados por un base rítmica que es una locomotora lanzada a máxima velocidad y explotando con toda la furia que su cantante Zack de la Rocha entrega en cada canción. Hermano, basta el primer riff del primer tema para que tengas ganas de empezar a saltar como un endemoniado por todo el cuarto o, en su defecto, iniciar algún tipo de revolución. Imaginate cuando llegás al final y pasaste por un bombardeo de energía a cargo de "Know your enemy", "Killing in the name of", "Bombtrack", "Freedom", "Bullet in your head"... Muchos podrán acusar a los miembros de la banda de ser "comunistas en Estados Unidos que salen por MTV" pero: a) eso es una pavada, hay miles de tipos en Estados Unidos que no se comen la gran propaganda yanqui (Chomsky o Sontag son buenos ejemplos) y me parece inteligente utilizar a los medios masivos para hacerle llegar a las masas determinadas ideas a las que no tendrían acceso por otro medio, (b) el disco es demasiado bueno como para detenerte en cuestiones ideológicas y no escucharlo.



82- Good God's Urge
Porno For Pyros (1996)
Temas clave: 100 ways, Kimberly Austin, Tahitian moon

Este disco excelso, es uno de los mejores de los muchos grandes discos que se hicieron en los '90. Es en este album donde Porno For Pyros pareció encontrarse como banda, algo que nunca sabremos ya que se separaron al año siguiente. Son 38 minutos, 38 exquisitos minutos repartidos en 10 canciones atmosféricas y hermosas. La mayor parte de los temas suenan a lo que se puede esperar que surja del lugar en el que fueron compuestos: en un estudio sobre la playa de Zuma, en California. Entonces las canciones poseen -a pesar de que ninguna supera los 4 minutos de duración como máximo- la majestuosidad y profundidad del mar. Pero al mismo tiempo son bellas como el sol del atardecer fundiéndose en las olas, y son dulces como los destellos de la luna cortando la mole negra del océano. A veces, solo en ocasiones como "Tahitian Moon" (otro clásico alternativo de los 90's) o "Dogs rule the night", poseen la adrenalina del surfer que desafía la furia del mar. Pero, lo dicho, en su mayor parte el disco es una invitación a dejarse llevar por el influjo del mar y reposar el espíritu y la mente. "Porpoise Head" es mística y psicodelia en acto; "100 ways" posee una de las letras más bellas y románticas que un hombre pueda haberle escrito a una mujer; "Kimberly Austin" y "Bali Eyes" demuestran como se puede ser infinitamente dulce sin ser meloso; "Thick of it all" es neopsicodelia pura, la definición que más le cabe es 100% "trippy", no se me ocurre un equivalente en castellano; "Good God's Urge" es una belleza de emoción pura que de pronto se vuelve hermosamente deforme; "Wishing Well" es fantástica, climas y misterio que llenan la noche de promesas, para explotar en un fenomenal climax; y "Freeway" es el tema que más se parece a las canciones del primer album. El disco entero es una celebración a estar vivo y ser uno con la naturaleza. Un mensaje bastante hippie es cierto, pero lógico tratándose de Perry Farrell, y disfrutable por cualquiera cuando está expresado en 10 canciones de este calibre.

Bonus track: Como si fuera poco, en este disco aportan Dave Navarro (ex Jane's Addiction), David J y Daniel Ash (Love & Rockets) y Flea (Red Hot Chili Peppers)


83- So tonight that I might see

Mazzy Star (1993)
Temas clave: Fade into you, Into dust, Wasted


A principios de los 90's la música alternativa norteamericana era una máquina de mostrar bandas que habían vivido en el mundo subterráneo durante años, a la espera de una oportunidad. Esas bandas repasaban todos los géneros y los regurgitaban en nuevas expresiones musicales: el punk, el pop, el metal, el jangle pop, el hard core, el rap, el hard rock, el garage, el noise, el funk y muchos más se unían en las más variadas y originales expresiones. Fue un momento glorioso para el rock, desde mi punto de vista. Pero, paradójicamente, hubo un género al que en Estados Unidos (no así en Inglaterra) no se le dio tanta bola: la psicodelia. La excepción, o mejor dicho, la mejor excepción a esa regla fue Mazzy Star, conformada por el guitarrista David Roback y la cantante Hope Sandoval, más algunos músicos sesionistas. Sumergiéndose de lleno en el costado más oscuro, nostálgico y reposado de los Doors, la Velvet Underground y Jimi Hendrix, haciendo hincapié en los climas de ensoñación y surrealismo de la psicodelia, y con una buena dósis de espíritu folk, Mazzy Star se despachó con tres grandes discos antes de separarse: "She hangs brightly", "So tonight that I might see" y "Among my swan". Indiscutiblemente "So tonight that I might see" es el mejor de ellos. La bellísima, sinuosa, etérea voz de Hope Sandoval nos hace flotar en un trance hipnótico a través de los espacios lisérgicos creados por David Roback, en un disco atmosférico y nocturno. A ver si se entiende, el espíritu de "So tonight that I might see" es el mismo de canciones de los Doors como "The End", "The Crystal ship", "End of the night" o "Strange days". Quienes conozcan esas canciones van a captar de inmediato de qué les hablo. "Fade into you", "Mary of silence", "She's my baby", "Blue light", "Into dust", "Wasted" son algunos de los grandiosos temas que componen este disco único, ideal para apagar la luz, prender unas velas y dejarte llevar hacia el fin de la noche.


84- Deserter’s songs

Mercury Rev (1998)
Temas clave: Holes, Godess on a highway, Endlessly

Si bien es muy distinto a los trabajos anteriores de Mercury Rev -lo que en muchos casos genera reacciones adversas- lo cierto es que es mucho más accesible que aquellos discos y de ninguna manera peor, simplemente es otra cosa. No tanta experimentación ni ruido blanco, más hincapié en las canciones propiamente dichas y sin dejar de lado la orquestación que es marca registrada de la banda. Excelentes melodías, cantadas por la extraña voz de Johnatan Donahue, flotan entre armonías teñidas de psicodelia. Hay momentos sublimes de pop indie que se sumergen en texturas musicales orquestadas con buen gusto infinito. Casi como si la Velvet Underground hubiera grabado un disco estando de ácido. Es ideal para escuchar a la noche, mientras se viaja por una ruta solitaria, o quizás en una playa alejada mientras se disfruta del eterno girar de las galaxias sobre el mar. "

85- Tribute to a work in progress

Black Crowes (2000)

Temas clave: She talks to angels, Wiser time, Remedy

Los Black Crowes me encantan, algo bastante lógico considerando que se trata d euna banda que jamás quiso cambiar nada, sencillamente se asumieron como amantes empedernidos del rock clásico. A ellos les hubiera encantado vivir entre 1967 y 1975, y eso expresaron en sus discos hasta separarse. Así que si alguien busca algo innovador en sus álbumes deberá continuar la búsqueda en otro lado. Claro que si uno ama el buen rock and roll, hard rock y blues en la vena de Zeppelin, los Faces y los Stones, los Black Crowes son la elección correcta. Sus primeros discos son sencillamente fabulosos, me cuesta mucho elegir entre "Shake you moneymaker", "The Southern Harmony and Musical Companion", "Amorica" o "By your side") por eso caigo en la tentación de este grandes éxitos, una excelente opción ya que abarca la enorme mayoría de su carrera con excepción de "Lions", su flojón álbum despedida. Los Crowes han escrito una parva de grandes singles, que son los que están en este disco casi sin excepción (para mi gusto solo faltarían "Sometimes Salvation", "High Head Blues" y "She gave good sunflower"), lo que me facilita aún más las cosas.





86- Soup
Blind Melon (1995)

Temas clave: Toes across the floor, 2x4, Mouthful of cavities

Complicada elección, ya que Blind melon sacó solo dos discos, y en el primero están clásicos como "No rain", "Change" y "Tones of home", además de ser undisco que me trae gratísimos recuerdos. Pero "Soup" es más completo, más redondo, aquí demostraron que también podían ser concisos y escribir grandes canciones bien armaditas, además de aquellas evidentemente surgidas de zapar que habían mostrado en el primer disco. En "Soup" las ideas y el sonido encontraban un foco, una dirección, una coherencia que se expresaba en una serie de estupendas canciones absolutamente retro. Como ya dije en mi opinión sobre su debut: Blind Melon estaba esencialmente inspirada por el sonido San Francisco de mediados de los '60 (Grateful Dead, Jefferson Aeroplane, The 13th floor elevators), más una buena dósis del primer Led Zeppelin y alguito de country y folk. Todas esas influencias están mejor encaminadas en su segundo disco y auguraban un futuro más que interesante, que quedó súbitamente coartado por la muerte de Shannon Hoon. Muerte provocada por una letal adicción a las drogas que se percibe en el sombrío espíritu del disco. Donde el debut era alegre y soñador, "Soup" es reflexivo e intimista. Abre con dos rockers estupendos a lo Zeppelin ("Galaxie" y "2x4"), al que le sigue la oscura "Vernie", un espacio más alegre -musicalmente, la letra es tremenda- con los aires country de "Skinned". Entonces viene mi favorita del disco: "Toes across the floor", de base folk y con una nostálgica harmónica blusera, revela nostalgia y sentimiento de pérdida en la voz y la letra de Shanon Hoon. Un tema muy al estilo de Led Zeppelin III. Le sigue "Walk" que rescata ese clima de ensoñación que caracterizaba al primer disco con toques folk y un duo de banjo y armónica que es una delicia. Llega entonces "Dump Truck", un hard funk que no está mal, pero que no me saca la cabeza. Entonces es el turn de la brillante "Car seat (God's presents)", en la misma vena que "Walk", pero mucho más interesante desde los ritmos, arreglos, armonías utilizadas y melodía. Me recuerda un poco a Jefferson Airplane, con esos aires psicodélicos entregados por la percusión y los arreglos de flauta y violín. Un midtempo con ínfulas funk es la siguiente escala, llamada "Wilt", nunca me llamó demasiado la atención. "The Duke" también tiene el color del primer disco: un atardecer veraniego en una playa solitaria y alejada, ensoñación y reposo. "St. Andrew's Fall" tiene aires funkies y disco -en la guitarra- pero con muchísimo más estilo que los otros funkies del disco, lástima el desmadre al final. "New life" es una balada llena de esperanza, que Hoon le escribió a Nico, su hija recién nacida, aunque -tengo que decirlo- a pesar del motivo que la inspiró no es gran cosa musicalmente. Le sigue la estupenda "Mouthful of cavities", una melancólica balada folk acústica con fuertes influencias de Nick Drake y también de "Battle of Evermore" de Led Zeppelin en las armonizaciones de las voces. El cierre está a cargo de "Lemonade", que pretende ser más festivo pero que fue una mala elección para terminar el disco por que es de lo peorcito que ha hecho la banda. En el balance final, hablamos de un muy buen disco, de una banda tremendamente prometedora, truncada en plenos comienzos.

87- Dog Man Star

Suede (1994)

Temas clave: We are the pigs, Daddy's speeding, Heroine

El segundo trabajo de Suede es absolutamente pretencioso y grandilocuente. Increíblemente sale muy bien parado de esa situación. Hay que darle más tiempo que al primer disco pero, de a poquito uno empieza a descubrir su majestuosa belleza y su elegante melancolía. Menos glamoroso que "Suede", más opresivo, menos direct, aunque no llega ser intimista debido a su grandilocuencia. Canciones como la épica "We are the pigs", la dramática "Heroine", las delicadas "The wild ones" y "The 2 of US", la depresiva "Daddy’s speeding", la energética y muy Bowie "New Generation" o las épicas "The Hollywood life" y "The asphalt world" nos regalan algunos de los mejores momentos de la dupla Anderson-Buttler. Justamente, en plena grabación del disco, el guitarrista decidió irse de la banda, lo que hace aún más valorable que el resultado final sea tan pero tan logrado.



88- The Bends

Radiohead (1995)

Temas clave: Fake plastic trees, Street spirit, High and dry


Si Nirvana fue la mejor banda de la primera mitad de los '90, Radiohead lo fue de la segunda. Y, a pesar de que tantos se llenan la boca hablando de "OK Computer", para mí "The Bends" es su mejor disco. No tiene un solo tema malo y los mejores temas son absolutamente perfectos. Tiene rock (guitarras distorsionadas, acoples, energía), está bañado por una melancolía infinita, tiene la voz incomparable de Thom Yorke cantando las mejores melodías que haya hecho Radiohead y la guitarra delirante de Johnny Greenwood -haciendo de John Cale- para darle a cada tema un toque único y extremo. Cualquier amante de la buena música no puede pasar por el mundo sin haber disfrutado de joyas como las tremendamente dramáticas "Fake plastic trees" y "Street spirit"; con la dulce añoranza de "High and dry"; con las sorprendentes dinámicas de "My iron lung" o "Bones"; con la potencia de "The Bends"; la dulce "Black Star"; la interplanetaria "Plantet Telex"... y así puedo seguir interminablemente. Aquí es donde Radiohead alcanzó su plenitud como banda de rock de guitarras, luego se volvería más experimental, más "arty", pero en "The Bends" es donde suena más auténtica y directa, y donde Thom Yorke exhibe como nunca su capacidad como compositor. Un disco totalmente indispensable.

89- Parklife

Blur (1994)

Temas clave: Boys and girls, Parklife, Tracy Jacks

A mi juicio, Blur siempre fue desparejo en sus discos; de cada uno de ellos se pueden sacar seis grandes temas y el resto es desechable. La excepción se llama Parklife (y también "Modern life is rubbish" para ser justos), un disco increíble de pop británico, quizás uno de los mejores que ha dado el brit pop en los '90. Un gran tema detrás de otro, con las letras más ácidas escritas por un inglés (y sabemos cuán ácido puede ser un inglés), ironizando el modo de vida británico de la última década del siglo en una suerte de mordaz lectura costumbrista alla Ray Davies. "Girls and boys", "Parklife", "Tracy Jacks", "This is a low", "Magic America", "End of a century", una verdadera legión de excelentes temas, algunos de ellos más dance, otros más punkies, espíritu pop con gotas de psicodelia y corazón tradicionalmente británico, pero todos (y repito: TODOS) una verdadera clase de cómo se hace pop con estilo. Clásico sin discusiones.




90- Definitely maybe

Oasis (1994)
Temas clave: Live forever, Rock and roll Star, Supersonic


Así suena una banda de pendejos que quieren ser estrellas de rock y tocan como si efectivamente ya lo fueran. Hay arrogancia en este disco, por todas partes, y hay también canciones excelentes, clásicos. Este es el álbum que inició la Segunda Invasión Británica, hecho por la banda que lideró esa explosión. Muchos dicen que Oasis se copia todo de los Beatles, pero en este trabajo se aprecia que los de Liverpool no fueron sus únicos maestros. En "Definitely maybe" se perciben lecciones muy bien aprendidas de muchos de los grandes surgidos de Manchester: los Stone Roses, los Charlatans y los Smiths. En joyas como "Live forever", "Supersonic", "Cigarrettes and alcohol", "Up in the sky", "Bring it on down" o "Rock and roll star" se resume una larga tradición de pop británico, hecha de grandes melodías, tocadas con estilo y ansia de vivir rápido. Si hablamos de Oasis, no hay nada mejor que esto.


91- Elastica

Elastica (1995)

Temas clave: Connection, Stutter, Line up

Es difícil que alguien que haya estado atento a la música de los '90 no haya escuchado el hit "Connection" de Elastica. Es difícil que alguien no haya visto aquel estupendo video o haya sido seducido -seas hombre o mujer- por la sexy Justine Frischmann. Lamentablemente Justine terminó siendo más famosa por ser la ex novia que le rompió el corazón a Damon Albarn (y que inspiró el disco "13" de Blur) que por su trabajo con Elastica. Y es una lástima porque este disco es soberbio, uno de los mejores que entregó el rock alternativo y el brit pop de los 90's. ¿Qué vas a encontrar en el primer disco de Elastica? Excelente rock-pop-punk-garage, bien 90's en su sonido crudo y despojado, y que condensa sabiamente sus mútliples influencias, que van desde Adam and the Ants a The Clash, de The Breeders a Wire. La banda rockea y lo hace con autoridad y energía envidiables, pero a la vez es dueña de una melodicidad y de unos coros notables. La combinación vuelven adictivo al disco hasta límites insospechados. La lista de temas que recomiendo con los ojos cerrados es extensa: "Line Up", "Connection", "Stutter" (el mejor coro de mucho tiempo a esta parte), "Waking up", "Car song", "2:1", "S.O.F.T.", "All nighter", "Never here" son indispensables en la discografía de cualquier amante del pop que se precie de tal.

92- Radiator

Super Furry Animals (1997)

Temas clave: Demons, The placid casual, Chupacabras

Para aquellos que no los conocen: los Furries son quizás el más logrado exponente de la camada de bandas que surgieron en Gales durante los '90 (otras: Manic Street Preachers, Gorky's Zygotic Mynci, Catatonia...). Y "Radiator", su segundo disco es espectacular. Pero, primero, ¿qué hacen? Pop + rock + psicodelia + algún toque de electrónica + melodías grandiosas + una irreverente pasión por experimentar. Imaginen meter en una licuadora a Bowie, Zappa, los Beatles, Blur y el Pink Floyd de Syd Barrett, todo con actitud punk. El resultado es inmejorable y se llama Super Furry Animals. Y "Radiator" es donde a mi juicio mejor se conjugan todos los elementos que hacen a los Furries tan interesantes. Además de tener las mejores canciones... Todos los temas del disco me parecen excelentes pero, si tuviera que elegir, mi equipo formaría con: "The placid casual", "The international language of screaming", "Demons" (im-pe-ca-ble), "Play it cool", "Chupacabras", "Torra Fy Ngwallt Yn Hir (sí, está en gaélico)" y "Mountain people". Fundamental.



93- Out west

Gomez (2005)

Temas clave: Get miles, We haven't turned around, Shot shot

Gomez ya no se edita en la Argentina y esa es una desgracia musical, porque implica la imposibilidad de conseguir los originales de discos como este. Tras editar cuatro discos de estudio, uno mejor que el otro, todos imposiblemente buenos, llegó la hora del disco en vivo. Uno trataba de imaginar cómo podía sonar esta banda en directo. Y, considerando el espíritu que anima a Gomez, solo podía imaginar algo bueno. Pues bien, es mucho mejor que bueno, es tremendo, alucinante y todos los adjetivos positivos que se les ocurran. Gomez se parece a una banda de amigos que se junta a tocar lo que les gusta, sin importarles un ápice las modas o direcciones musicales en boga. Claro, cuando ese grupo de amigos es un compilado de cinco músicos de puta madre y "lo que les gusta" es inmejorable, el resultado es la música que hace Gomez, una de las bandas más originales surgidas en los últimos quince años. Y este doble trabajo en vivo es la mejor manera de comprobarlo. Porque reune veinte de sus mejores canciones -en realidad 18 y media, ya que hay un cover y medio- extraídas de tres fechas en el Fillmore West de San Francisco en febrero de 2005, lo que hace que suene prácticamente como si fuera un recital entero, con una frescura y una fuerza incomparables. De hecho, la banda se apoya un poco más en las guitarras y en la bata que en sus discos, lo que les da una potencia inusitada -el mejor ejemplo es el tremendo cover de "Going out west" de Tom Waits- que no hace sino mejorar aún más su música, si eso es posible. Su buen gusto musical se expresa en la estupenda version de "Black Eyed Dog" una de las mejores y menos conocidas canciones de Nick Drake. Pero es el tratamiento de su propio material, al que hacen brillar en todo su esplendor, lo más jugoso del asunto. Haciendo honor a su espíritu sesentoso/setentoso pueden colgarse en impresionantes zapadas bluesero psicodélicas, como retrabajar una canción abordándola desde otro lugar rítmico y armónico, convirtiéndola prácticamente en un tema nuevo. O simplemente pueden tocar las canciones tal cual los originales, pero con más fiereza e intensidad, dejando en claro que su fama de estupenda banda en vivo está plenamente justificada. Sencillamente: Gomez es tu nueva banda favorita, solo que no lo sabés porque nunca los escuchaste. Este disco es una buena manera de saldar esa deuda con tus oídos...

94- Sleeping with ghosts

Placebo (2003)

Temas clave: Thebitter end, This picture, Special needs

Difícil elegir entre el primero, Without you I'm nothingy este. Pero bueno... vamos con éste. "Black Market Music", el tercer trabajo de Placebo y último editado acá, había sido un disco correcto pero que nos había dejado con un ligero sabor a decepción. Carecía de la originalidad del debut y de la magia negra de "Without you I'm nothing". Pues bien, Brian Molko y Cía. se reivindicaron y cómo con "Sleeping with ghosts". Es decir: si te gusta Placebo tenés que hacer lo imposible por conseguir este disco, porque si no es el mejor de la banda, pega en el palo. ¿Qué tiene de tan bueno "Sleeping with ghosts"? Para empezar nomás, las canciones. Molko compuso una buena cantidad de grandes temas. A lo que se le suma que esta vez decidieron incluir algunos toques de electrónica pero -a no temer- en las dosis justas como para enriquecer las canciones y darles una vuelta de tuerca. La banda sigue sonando como siempre, es Placebo sin dudas, pero con un condimento más. Además es el trabajo de una banda madura. Si en el debut se trataba más bien de una suerte de catálogo de influencias, en el segundo se sumergían en un pozo de dulce oscuridad y en el tercero rockeaban al palo, aquí todo está perfectamente balanceado. El disco recorre elegantemente un camino hecho de sus mejores virtudes, mostrando una unicidad de hierro, sin puntos flojos ni distracciones que lleven a calles sin salida. Todo fluye armónicamente y así Placebo nos regala un disco casi perfecto, de esos que terminás amando.




95- Life in other planets

Supergrass (2002)

Temas clave: Grace, Can't get up, Seen the light

El cuarto disco de Supergrass deja en claro desde la primera hasta la última nota que estamos ante una de las mejores bandas que ha dado el brit pop en años. Un debut deslumbrante de pop efervescente, un segundo disco donde la banda jugueteó con la psicodelia, un tercer trabajo que hacía equilibrio entre ambas cosas y ahora nos regalan "Life on other planets" un disco maduro, elegante, lleno de estilo en sus arreglos pero que jamás es serio: vamos, se trata de Supergrass y eso es garantía de espíritu festivo. Como siempre, meten en la licuadora sus influencias, compuestas por lo mejor del pop inglés -desde los Kinks a los Buzzocks, desde T. Rex a The Who, desde los Beatles a Bowie- y te las devuelven trasnformadas en gemas pop que suenan a... ¡Supergrass! Es imposible no amar instantáneamente melodías y coros de canciones como "Za", "Seen the light", "Grace", "Cant' get up", "Brecon Beacons", "Evening of the day" y "Run". En poco más de 40 minutos, Supergrass sintetiza lo mejorcito del brit pop y te invita a disfrutarlo. Y esa, mis amigos, es una tentación irresistible.

96- Stories from the city, stories from the sea

PJ Harvey (2000)
Temas clave: This mess we are in, You said something, One line

Bueno, ante todo quiero decirles que PJ Harvey es una de mis cantantes femeninas favoritas, junto a Janis Joplin. Tiene una voz impresionante que la distingue claramente de ciertas "cantantes" que andan dando vueltas por ahí y que sólo gritan o hacen gorgoritos patéticos. Cuando PJ canta sabés que ella está ahí y querés escucharla, tiene actitud punk y al mismo tiempo esa sensibilidad que sólo las mujeres saben incorporar al rock, tiene muy buenas letras y canta como si en cada canción se le fuera la vida. Resumiendo: amo a esta chica. Siempre mi disco preferido de PJ había sido Dry, el primero. Hasta que sacó éste, un rosario de sus mejores canciones, con un sonido impecable y una producción de la hostia.



97- The Holly Bible

Manic Street Preachers (1994)
Temas clave:
Of walking abortion, She is suffering, 4st 7lb

Basta escuchar lo que hacen los Preachers actualmente para darse cuenta de quién era el alma mater detrás de la banda: su guitarrista y letrista Richey James. La banda nació en Gales en 1991 y era un torbellino de furia y angustia, políticamente desafiante e intelectualmente incendiaria (las letras de James dejaban claro que los tipos habían leído algo en sus vidas). Pero claro, James era anoréxico y de un equilibrio mental muy frágil. Un día de febrero de 1995, el tipo simplemente desapareció. Aún hoy nadie sabe si está vivo o muerto. Lo último que hizo fue "The Holly Bible", el tercer disco de la banda (y último que vale la pena), una obra contundente y definitiva cuya escucha se vuelve indispensable. Oscuro, con el bajo grueso que contrasta con las guitarras, una climática, la otra filosa, todos sosteniendo a esa voz desgarrada que escupe todo el dolor del mundo en temas realmente increíbles como "Yes", "She is suffering", "Die in the summertime", "If white America told the truth…", "Of walking abortion", "4st 7lb", "Archives of Pain", "The intense humming of evil"... A pesar de no ser tan conocido -afortunada y lógicamente, si tenemos en cuenta la actitud de la banda- este es uno de los mejores discos de la década del 90.




98- White Blood Cells

White Stripes (2001)

Temas clave: Fell in live with a girl, Hotel Yorba, Dead leaves and the empty ground

Los White Stripes son una ex pareja, que se hacen pasar por hermanitos (Jack y Megan White) y vienen de Detroit, la ciudad de los Stooges y MC5. Él toca la guitarra y ella la batería y lo que crean es de lo mejor que ha dado el rock del nuevo milenio. Machacante, primitivo, ruidoso y distorsionado, haciendo honor a su noble cuna, el sonido de White Stripes es similar a las grandes bandas de garage de fines de los 60's y principios de los 70's. Pero no es esa su única influencia, también tienen incorporado un gran microchip blusero, al que se le suma una evidente pasión por el pop de los Kinks. El resultado es realmente sensacional y en "White Blood Cells" (su tercer trabajo) es donde mejor se equilibra el instinto animal de los hermanos White con el buen gusto para la melodía y los arreglos (básicos, sencillos, fantásticos arreglos). No sé realmente por cual tema empezar porque son todos muy buenos. Quizás podría señalar los que son distintivos de las diferentes facetas de la banda: "Fell in love with a girl" es un joya de pop-garage de menos de dos minutos de duración. "Hotel Yorba" nos recuerda a los Stones de Exile on Main Street. "Dead Leaves and the empty ground", "Offend in every way" y "The Union Forever" podrían haber sido uno de esos blues ultrapesados de Led Zeppelin II. "We're going to be friends" tiene la delicadeza y la riqueza melódica de una balada de los Beatles. "I'm finding it harder to be a gentleman" y "The same boy you've always known" comparten, además de su excelencia, similares dósis de pop-garage y hard rock. Un futuro clásico.




99- Veni Vidi Vicious

The Hives (2000)
Temas clave: Hate to say I told you so, Die! All right!, Main offender

Señores, sin ningún temor a sonar grandilocuente: he aquí el mejor disco del año 2000, por lejos. "Barely legal", el debut de los Hives, era una letal combinación de punk rock, ska y mod a hipervelocidad. Pero en "Vini Vidi Vicious" los muchachos bajaron el frenesí en favor de la melodía y el resultado fue un clásico instantáneo. Porque bajar la velocidad no implicó perder ni un ápice de su escencia: esto es una banda de garage al mejor estilo Stooges, tocando con toda la energía imaginable canciones llenas de impecables melodías sesentosas con coros automáticamente contagiosos, enmarcadas en el sonido más dulce: el de las guitarras distorsionadas. "Vini Vidi Vicious" dura apenas 30 minutos, es todo lo que necesitan para arrasar tus oídos y convertirte a la hermosa religión del punk rock y pop de garage. No hay una sola canción aquí que no sea excelente como mínimo, y muchas de ellas son de lo mejor que se ha escrito en la historia del punk rock y el garage, como "Hate to say I told you so", "Die, all right!", "Main Offender", "Outsmarted", "Declaire Guerre Nuclaire" e "Inspection Wise 1999". Otro clásico del mañana.

100- Deloused in the comatorium

Mars Volta (2003)

Temas clave: Drunkship of lanterns, Televators, This apparatus must be unearthed

Cuando a fines de 2001 se separó At the Drive In, en el momento exacto en el que se convertía en la nueva gran cosa del rock alternativo yanqui, nadie podría haber imaginado que dos de sus integrantes (el cantante Cedric Brixler y el guitarrista Omar Rodríguez) iban a formar de inmediato una banda llamada Mars Volta. Y mucho menos que esa banda iba a estar tan pero tan buena e iba a hacer algo tan radicalmente distinto a su antecesora. At the Drive In parecía la reencarnación de la furia musical y la rebelión política de MC 5. Mars Volta es... ¿qué es? Escucho la banda y me recuerda a esos grupos de fines de los 60's y principios de los 70's dispuestos a experimentar con todo ritmo, estilo y sonido imaginable, sin perder melodicidad en el camino. Para músicos que tienen raíces en el punk y el garage, un disco como "De-loused in the comatorium" es realmente extraño, parece un álbum de Led Zeppelin, pero también tiene cosas del primer Santana y también cosas de Coltrane. Hard rock, neopsicodelia, freejazz, ritmos netamente latinos, punk rock... Todo está mezclado en un trabajo que es un viaje increíble, liderado por la guitarra delirante de Omar Rodríguez y por la voz de Cedric Brixler quien olvida los alaridos salvajes de At The Drive In para demostrar que tiene una de las mejores voces aparecidas en los últimos diez años. Si bien estilística y sónicamente "De-Loused at the Comatorium" tiene cosas que lo hacen totalmente actual, al mismo tiempo está animado por el espíritu de la década que va del '65 al '75, convirtiéndolo en un disco único, incomparable y muy superior a lo que han sacado sus contemporáneos el año pasado. Algunos han empezado a ponerle etiquetas como "punk progresivo" y cosas así. Olvídense de las etiquetas, que solo sirven para delimitar, y escuchen la música, que es la que dice todo. Y tiene mucho para decir...

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4 Comments:

Blogger Fede / Billie said...

¡Cómo me lo va a etiquetar como "Boludeces"..., si es una lista del carajo! (Para tener impresa al costadito del Torrent, jaja)

Un abrazo

9:30 AM

 
Blogger beto9 said...

Ja ja ja! Gracias, Fede! Hay varios bastante obvios, pero espero haberte tirado alguna perlita. Un abrazo!

5:03 PM

 
Blogger Unknown said...

¡Señor!, si hasta da ganas de mudarse a la misma isla. Solo añadiría a esta lista de cien un disco fetiche: "9", de PIL.

Un abrazo.

L.

11:01 AM

 
Blogger beto9 said...

Leggiere querido! Hacer ese listado de apenas 100 fue toda una suerte de ejercicio de la voluntad y de la postergación de la gratificación. Tan solo pensar algunos de los que he dejado a fuera, me crispo...

12:16 PM

 

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